Veo el nudo en tu garganta
han sido solo unas palabras,
pero veo todos sus trazos
distingo todas tus costuras:
hiladas durante años,
tejidas a oscuras.
Se que es un sabor amargo,
que el valor es un mal trago
cuando cae en verso roto
sin la respuesta que esperas
y el silencio se hace tosco,
perdiste la apuesta.
Cómo te tengo sin chispa,
sin nada que arda ni viva,
tu me enseñas a esperar
dejar que la semilla germine,
incluso de adulta dejarla quemar
y que el fuego lo nuestro avive.
Tengo el corazón amargo:
te quiero pero no te amo,
mi cerebro me dice que huya
que quedarme será doloroso
y no tengo ninguna excusa
te mereces del amor todo.
Me entra el modo egoísta
sueño con compartir tu vida,
me ha entrado tanto miedo
que al final será más grave,
no sé qué diablos he hecho
hay besos que nada valen.
Qué amargo el sentimiento
no te amo pero te quiero,
dices que no es suficiente,
pero el tuyo es el corazón roto,
no funcionó aunque lo intenté,
duele tanto estar tan solos.