Tengo la boca sucia
llena de cosas tuyas
como tu lengua
y tus dulces de saliva envenenada
trenzada con ácidas palabras,
y cansado de tus desprecios
destrenzo en mis entrañas
tu veneno y tus ”te quiero”.
He viajado a través de tu piel
y no he podido colarme
en ninguno de tus poros,
rezumaban tanta hiel,
y no he podido salvarme,
tanto veneno de tus ojos.
Llevas la ropa insolente
y la cara pintarrajeada
pétalos negros por atuendo,
y amapolas amarillas,
imposibles, como tu risa,
prendidas de tu pelo…
Tengo las brazos confusos
no saben si abrazarte
o si dejarte ir,
no saben si besarte
o si dejarte así,
mis labios, no lo saben…
No sé que hacer contigo
corazón de piedra maldito
no sé que hacer contigo
ni con tus suplicios,
ni tus viles vicios,
ni tus besos sucios…
