Perspicaz

No hace falta ser muy perspicaz
para darse cuenta que quizás
no necesite izar banderas ni estandartes
para demostrarte que te quiero
que la devoción se lleva dentro
y yo voy en procesión hasta tu corazón,
para contarte,
que el cielo se me queda pequeño
cuando pinto en verso todo lo que siento
y ahora dirás,
que las palabras se las lleva el viento
pero al mirar, hacia mis ojos verás
como en silencio reflejan mi universo:
tu boca, tus ojos y un mechón de tu pelo
que siempre me estorba cuando te beso.

Contigo soy Guardián del Alba,
cuando despiertas
bailas con mi alma
lo mismo la elevas al cielo, que luego,
la dejas caer al suelo
como una piedra…
así mi corazón agitas
y aún dudas de que te quiero
yo solo quiero gritar:
te amo y por ti muero.

Princesa de las hadas,
desnuda está tu alma
yo la visto con éstas palabras
bordadas con mis venas,
¿es suficiente princesa?
la sangre de éste arcángel
para construir mil estandartes
repletos de sentimientos
o quizá baste éste beso,
y así sepas,
lo mucho que te quiero.

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