Cuando te miro cruzar la calle,
con el sol posado en tus hombros
al mismo tiempo que arde
el cielo cansado en tus ojos
camino del mismo sitio de nadie
dónde te llevan las huellas del piso.
Cuántos castillos de aire,
irás alzando a cada paso,
mientras acude el ocaso
imperturbable a su cita
tu le dedicas un paso de baile.
Yo no bailo con princesas
y mis castillos son de naipes
soy un príncipe mendigo
y no me duele el ser cobarde.
Cuando te oigo llamar al timbre
con la insistencia irresistible
de tu juventud más inquieta
mientras cantas tras la puerta
y se hace el sonido visible,
lo que escucho es el universo.
Cuantos matices he de descubrir
en las palabras que pronuncias
como aprendices de minucias
estudio y recuerdo tu voz
por si acaso tuvieras que huir.
Yo no huyo con estrellas
y mis canciones son de versos
soy un poeta desconocido
y no me duele el ser etéreo.
Cuando te huelo al acercarte,
con el olor dulce y peligroso
que tu felina piel emane
se rinde mi cerebro curioso
sin que piense y prepare
ninguna respuesta definitiva.
Cuantos diferentes perfumes
voy descubriendo tan despacio,
cuando enfrentes mi espacio
sucumbiré a tu fragancia
antes de que se esfume.
Yo no me enfrento a fieras
y mis garras son tan suaves
soy un aprendiz de gato
y no me duele que me hieras.
Cuando te siento temblorosa
entre mis brazos anhelantes,
estiras tus manos ansiosa,
entre ambos se escurrirá el aire,
y nuestros cuerpos se fusionan
ocupando el mismo sitio.
Cuantos abrazos me he perdido
cuando aún no te conocía
y mi piel acaso vacía
iba implorando contacto
haciendo tan poco ruido.
Yo no fabrico tales abrazos
y mis manos no son grandes
soy un lobo solitario
y no me duele estar cansado.
Cuando saboreo tus labios
y mi paladar se convierte
en un crítico tan sabio,
tu lengua mía para siempre
reduciendo los agravios
que mis labios te causaron.
Cuántos besos se escaparon
y fueron a parar a otras bocas
cuando mi deseo era la roca
que necesitaba ser tallada
para convertirse en pájaro.
Yo no beso a principiantes
y mis labios son esquivos
soy un pájaro de piedra
y no me duele ser estable.