Asume el riesgo,
sigue siendo su misterio
terminará maltrecho
y acabará apagando su infierno
con un poco de esfuerzo
y esos suspiros de invierno.
¿Y qué será de la nieve,
si quiere ser fuego?
¿Y qué será del rehén,
si esconde un guerrero,
con sus miradas asesinas
y sus abrazos intensos?
Esa mirada tan fría
camufla un secreto
nuestro pesado poeta
no es tan fiero
como lo pintan
ni su tinta es su sangre
ni su odio es tan grande,
y no es tan idiota
para combatir su destino.
Aún se equivoca,
sigue siendo aquel niño
que soñaba contigo
acurrucado en tu regazo
y en su sueño ese abrazo
que nunca negabas.
Tanto ha pasado
sus ojos cansados
han cambiado
y terminado de soñar,
tu media sonrisa
dio paso, a ciertas mentiras
y acabó por luchar
con sus propias lágrimas
que en cada gota llevaban
un «No me olvides…»
Si se lo pides será tu héroe
y tu guerrero, y tu su guerrillera
en estos versos, en vuestra guerra
los dos juntos sereis más
que uno sólo…
¿Será cierto que es guerrero?
todavía no ha muerto
pero está cautivo y cautivado
aunque no tiene prisa
por escapar de tu prisión
que encierra su corazón
y tantas cosas…
Más de mil años estaría
descubriendolas una tras otra
si tu le dejas, y si lo besas
sería tu héroe y tu guerrero.