No lo hago porque sí… Lo hago sin querer, y sin querer hacerlo, voy fluyendo inconscientemente por un roído recipiente, y confundo el tiempo y el espacio es una mera sucesión de sitios que no habré de pisar o de constelaciones que no sabré nombrar. Y me importa lo mismo que todas esas ratas de ciudad, mientras voy escribiendo ésto en un tiempo que no es, sino que ya ha sido y siempre habrá sido cuando lo perciba, es por eso que todo lo que escribo es relativo y pasado está…
Es mi confuso espacio-tiempo dónde a veces caigo, a veces me elevo, siempre bailo con la palabra, siempre beso el suelo por donde se arrastr. Mi tiempo no tiene nada de eterno sólo puedo dejar constancia de mi paso por ésta vida con algunas letras, sin embargo, mi fecha de caducidad seguirá estando impresa sobre la tapa anunciando mi final sin nada que pueda hacer para atrasar…
A grandes pasos arranco corazones los voy hilvanando como si fueran cuentas y contaran desamores llegados y por venir. Emoción golpea fuerte y en otras épocas, en mi porvenir, roza levemente mi piel haciendome sentir algo ínfimo, ni con diez mil palabras lograré describirlo, sólo se puede descubrir cuando te toca. Es la levedad de lo breve de la que ya hable con otras letras ensalzando la brevedad de lo leve que todo lo conmueve. Dejo caer los ojos sobre el papel, otra vez, como tantas otras veces y lo que veo no me convence parece como un pensamiento criogenizado, el mismo pensamiento que se muerde la cola como un pez y jura que ésta será la última vez… Es mi confuso espacio-tiempo no intentes enfocarlo no tiene sentido, ni mucho, ni poco, ninguno…