Te dije te odio para siempre,
no quise perdonar,
déjame que te desprecie,
no lo puedo olvidar.
Me voy sin convercerme
ya solo veo grises
no tienes que creerme
los dos estamos tristes
ni hubo amantes
ni fuimos felices.
Estabas tan convencida
los dos estamos rotos
por perdido lo dejaste
te dije yo llevo tiritas
ni un solo remiendo
ni siquiera despedida.
Me dijiste ya no siento
no te puedo ni besar
creeme yo no te miento
esto me suele pasar.
Nunca miramos atrás
después apareciste
no tenemos que fingir
el corazón ya no enviste
ni tenemos que huir
ni nadie se resiste.
Preguntas tan curiosa
como me trata la vida
mi odio ya se afloja
viendo cómo me miras
ni era el momento
ni supo serlo.
Quemamos el espacio
se lo tragó el olvido
se juntan nuestros labios
ya no hay fugitivos.