Todo es tan complicado

Todo es tan complicado
y nada es más sencillo,
que el aire escapando
de mis suspiros.

Y yo lo he visto todo
con mis ojos fijos,
he visto el frío
agobiando a tus manos
y he querido con abrazos,
de mis dedos,
calentar tus deseos.

Has consentido movimientos
con una mirada de miel
y erizaste tu piel
invitándome a ser viento
y rozar con alguna brisa
tu sonrisa de papel
y tus hombros sureños.

Todo es tan sencillo
y nada es más complicado,
que las horas entregadas
a ese abrazo.

Quiero saborear la magia
de tu suavidad,
y hablándote al oído, susurro,
sin hablar de nada
rozo con mis labios, murmuro
sin abandonar tu palma,
te digo: siento que estallan
mis ganas de compartir mi almohada
con nuevos versos
que hablen del intento
de sumergirme tan adentro
de tu boca,
mi lengua la ola que desboca
tu aliento.

Nada hay tan sencillo
y es lo más complicado
escapar de tu mano.

Yo sólo repito,
que estoy agotado
de frenar mis latidos,
de agotar mis sentidos
cuando hablo contigo
respirando tu halo,
no puedo y me inclino,
tan desesperado,
busco tu lado más tímido
y te ataco,
acariciando tu ombligo
te beso despacio,
perdido en tu espacio,
rendido a tus labios,
escarbo en tu atrio
tus quedos gemidos,
y respiro colmado tu ser
viniste a revolver
mis segundos con tus horas
de dulce caramelo
mi mundo en tu pelo
y bostezos al viento.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Volver arriba